Cámaras en las calles ¿realidad o percepción?

La tecnología se está convirtiendo en una de las grandes aliadas de las autoridades para proteger a los ciudadanos. Diferentes gobiernos alrededor del mundo han entendido que la inseguridad no solo impide a las personas tener una buena calidad de vida, sino que también puede llegar a frenar planes relevantes de gobierno relacionados con turismo e inversión. Ante esta situación, han empezado a abundar los ejemplos de ciudades que logran reducir sus niveles de inseguridad con los sistemas de videovigilancia en las calles.

camarasOcultas Empresa líder mundial en soluciones de conectividad y videovigilancia IP, da a conocer varios ejemplos de cómo la instalación de cámaras en las calles a través de avanzadas plataformas y programas está permitiendo reducir los delitos ciudadanos en diferentes partes del mundo. Una sola cámara instalada en una calle puede llegar a reducir los delitos ciudadanos a la mitad.

Las grandes ciudades son las que más han avanzado en soluciones de seguridad basadas en tecnología, y más específicamente en videovigilancia IP. En Londres, por ejemplo, las autoridades decidieron alojar una cámara de videovigilancia por cada 11 personas y distribuirlas por todas las calles de la capital inglesa. Como resultado, en 2009 el 95% de los casos de asesinatos investigados por las autoridades londinenses utilizó imágenes capturadas por las cámaras de videovigilancia como evidencia.

Los ejemplos también abundan en las diferentes ciudades de Estados Unidos, pero se destaca el caso de Boston, donde luego del atentado ocurrido en la Maratón en 2013 las autoridades lograron identificar a los sospechosos del atentado en imágenes captadas por las cámaras de seguridad que estaban ubicadas cerca al lugar.

Otro caso importante es el de Nueva York, en donde después del atentado del 11 de septiembre, las autoridades desarrollaron una extensa red de vigilancia utilizando los fondos federales contra el terrorismo. La estrategia de seguridad de esta ciudad incluye el despliegue de cámaras inteligentes que son distribuidas por diferentes lugares de la urbe y que están equipadas con un software de análisis de video que puede detectar actividades o comportamientos extraños, paquetes sospechosos y vehículos que circulan por un bloque determinado en forma continua.

Una tendencia que crece en Latinoamérica 

Tradicionalmente la inseguridad en las calles ha sido uno de los flagelos con los que han tenido que convivir las ciudades latinoamericanas. En Colombia, de acuerdo con una encuesta de Convivencia y Seguridad Ciudadana publicada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) en agosto de 2013, el 54,8% del total de la población encuestada en 20 ciudades indicó sentirse insegura en la ciudad en la que reside. Por esta razón, el tema de seguridad ciudadana fue uno de los más importantes durante el periodo de campañas presidenciales.

Ante los continuos casos de inseguridad que se presentan en Colombia, actualmente existen 6.314 cámaras públicas que han ayudado a capturar cerca de 8.000 delincuentes en flagrancia en el último año. La efectividad del sistema es tan alta que el gobierno colombiano anunció inversiones por 36.000 millones de pesos en cámaras de videovigilancia para mejorar la seguridad de las ciudades en 2014.

Otro caso exitoso en la región es Ecuador, país en el que en el 2013 se desmantelaron 4.381 bandas delictivas al tiempo que se creó el Servicio Integrado de Seguridad ECU 911, que llegó con más de 1.700 cámaras de vigilancia que se ubicaron en 14 provincias para ayudar a combatir la delincuencia en las ciudades.